La trazabilidad logística es una herramienta que consiste en una serie de procedimientos para poder identificar el viaje de una mercancía de principio a fin. Esto ayuda a localizar problemas y así optimizar nuestros procesos de transportación. Es importante tanto para las empresas que quieren perfeccionar su cadena de suministros, como para que los consumidores sientan más confianza y seguridad al adquirir productos.
Quizás te pueda interesar: ¿Qué es el cross-docking y en qué puede ayudarte?
Tipos de trazabilidad logística
- Trazabilidad ascendente, o trazabilidad hacia atrás
- De procesos, también llamada trazabilidad interna
- Trazabilidad descendente o hacia delante
La primera, en palabras simples, facilita la transparencia. Responde preguntas como ¿De quién recibimos las materias? ¿Cuándo se recibió? ¿Cuál es el número de lote del proveedor? ¿Qué medidas higiénicas-sanitarias tiene? ¿Cuál es el origen de este producto? La segunda, se refiere al seguimiento del proceso de transformación del producto dentro de la empresa. Se lleva un registro de los cambios que ha tenido, si se ha mezclado con algo, el resultado de la mezcla, qué materias lo conforman, etc. La tercera, se concentra en los productos ya listos y a su distribución; monitorea su llegada al cliente.
Todos los tipos de trazabilidad traen consigo múltiples ventajas: mejora considerablemente el control interno y externo de la mercancía, perfecciona la gestión de stock, incrementa la confianza de los consumidores, y aumenta la fiabilidad de la preparación de los productos, entre otras cosas. Para implementar estas herramientas en tu negocio puedes contratar un software de trazabilidad o, también, plataformas que incluyan algunos de estos beneficios.
Lee también: Te explicamos qué es el Machine Learning y cómo funciona.
