Frente a la antesala de las elecciones presidenciales de Estados Unidos, cuyo candidato Donald Trump lleva la ventaja de votos, surge la interrogativa sobre las implicaciones de los resultados definitivos sobre la logística y el comercio exterior en México.
Elecciones presidenciales e implicaciones en el T-MEC
En el contexto de la incertidumbre provocada por la inminente revisión del tratado entre Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y los resultados de las próximas elecciones estadounidenses, el comercio exterior de México se enfrenta a diversos retos tanto internos como externos que pueden influir en su competitividad.
Esto es lo que señala un estudio del Instituto Logístico de México (Iselogics) en colaboración con la Asociación Mexicana de Agentes de Carga (Amacarga), que también menciona problemas como los altos costos de almacenamiento en terminales, la inseguridad en ciertas áreas del país y la alta rotación de personal, entre otros factores.
¿Qué efectos tiene en la productividad del sector logístico?
El análisis mostró las opiniones ofrecidas por los actores del sector durante los foros de consulta, destacando la sugerencia de las agencias de que una parte de los cobros por almacenaje se destine a la mejora continua de las terminales portuarias.
Asimismo, el estudio señala que hay preocupaciones en torno a cómo los problemas políticos, la seguridad nacional y la fluctuación del tipo de cambio pueden impactar los tiempos de entrega.
Un aspecto importante que se destaca es la urgencia de garantizar la seguridad en lugares como el puerto de Manzanillo, donde las extorsiones y el robo de carga son problemas cotidianos que provocan pérdidas significativas.
Además, la lenta implementación de nuevas tecnologías afecta al sector, impidiendo la optimización de la gestión de las cadenas de suministro.
En el ámbito de la mano de obra, se evidencia la necesidad de contar con personal calificado en logística; el estudio revela que la industria sufre de alta rotación de empleados y escasez de profesionales especializados, lo que repercute negativamente en la productividad.
Por último, es crucial que el sector y las autoridades colaboren para desarrollar estrategias que mejoren la eficiencia de las redes de transporte en México, incluyendo carreteras, puertos y ferrocarriles, para evitar aumentos en costos que puedan perjudicar la competitividad en el mercado internacional.